La capital del Valle se vistió de fiesta para recibir a sus campeones deportivos. Un río de orgullo fluyó para rendir homenaje a los 839 atletas que retuvieron el doble título. Esta es la crónica de un triunfo anhelado y un abrazo colectivo a quienes enaltecieron el nombre de Cali, rey de copas departamental.
La caravana del triunfo
Los caleños salieron en masa. Se apostaron a lo largo del recorrido para aplaudir a los medallistas de la Sucursal del Cielo. Las chivas se pintaron de azul y blanco, lucieron la imagen de Cristo Rey y un mensaje: Cali Campeón. Los atletas, radiantes de júbilo, contagiaron su euforia a cada rincón de la ciudad.
La caravana avanzó al ritmo del Cali Pachanguero, con serpentinas y vuvuzelas. Cada kilómetro se sintió más corto entre carioca, globos de colores y vítores. Los asistentes entonaron «Para Cali», la emblemática composición del fallecido Tirso Duarte, el himno que los identificó durante los juegos.
Más de 500 medallas
“Arrancamos en febrero con la ilusión de ‘Cali Élite’ y de llegar a estos ‘Juegos Departamentales’ para salir campeones. Y no solo salimos campeones, barrimos. Sacamos 324 medallas de oro y más de 700 en total”: Alejandro Eder, Alcalde de Cali.
La noche cerró con bailarines de salsa, orquesta y fuegos artificiales. Con 213 medallas de oro en los XXIV Juegos Departamentales y 111 en los VII Juegos Para-Departamentales y Sordo-Departamentales, Cali batió todos los récords de las justas. La pasión por el deporte es tan grande como el corazón de la región.
Conozca algunas historias de valentía y resiliencia de los medallistas caleños: